"THE SICK ROSE" by Waldir Ruiz |
Es imposible no echarte de menos, pero los recuerdos los tengo dentro de un vaso debajo de mi cama. Esta vez no quise conservar los recuerdos a la manera de un cronopio. Dejar los recuerdos sueltos por ahí podía ocasionar dos cosas: o se lastiman ellos bajándose la acera o me lastimo yo viéndolos pasar, encontrándolos desordenados por todos lados. Por ese motivo decidí guardarlos dentro de un vaso debajo de mi cama. Mirá, intentar guardar los recuerdos en un vaso debajo de mi cama ha significado una tarea cuesta arriba para mí, vos sabés lo llorón que soy y hasta la fecha he dado con puros recuerdos duros, de esos que te ponen una cara de “no me botés”. Vieras, tremendo chantaje emocional que me han pegado. Creen que guardarlos en un vaso y debajo de mi cama significa echarlos a la basura. ¡Qué tontos!
Ya llevo cinco recuerdos en el vaso, eso sí, una vez dentro del recipiente, los bandidos no se salen, mientras tanto unos se esconden y otros saltan a la vista inevitablemente. El primero que capturé fue el de los días que le siguieron a la decisión de disfrutar unos buenos tiempos juntos: eran las primeras horas de unas mañanas de agosto y septiembre, me mataba sólo el hecho de verte esperándome... leyendo algo o fingiendo que leías para dejar escapar el tiempo. Este recuerdo me sacó una sonrisa nostálgica.
Le siguió el recuerdo de cuando me llevaste a tu casa y conocí a tu mama y a tu papa fortuitamente, porque no vivían juntos. Ese día conocí tu dormitorio y me regalaste aquellos libros que nunca te devolví. Ese día me ahogué en tu saliva, empecé a aprenderme tus lunares, a descubrir el significado de la expresión de tu rostro con cada movimiento mío, la imperfección perfecta de tu cuerpo, besar piel que nadie besa… este recuerdo se dejó guardar, pero me aruñó como gato cuando lo agarré. El recuerdo de lo feliz que estaba yo cada tarde que regresaba de tu casa a mi casa fue durísimo de atrapar, me puse dramático, lloré, pero lo guardé.
El otro recuerdo que yace dentro del vaso es el de tus ojos brillando cuando me encontraban: como besándome con la mirada, cuando en un espacio lleno de gente estábamos separados y a la distancia me veías… El quinto recuerdo es el de la última semana, vos y yo juntos, todo el día adyacentes uno del otro, desde el lunes hasta ese domingo en que te despediste de mí. A penas llevo cinco recuerdos dentro del vaso; sin embargo, seguramente, andan otros más por ahí huyendo “para que no los bote”; mientras tanto, buscándolos y guardándolos, hago que se escape el tiempo porque, verte, sí, verte. Verte. Verte. Verte. Eso es lo que no puedo…
huyyyy huyyyyy valla, sabes que has de estar cansado de tango alago, pero esta entrada esta genial.
ResponderEliminarEl hecho de que lo narres o lo cuentes de esa manera hace que sea como una especie de dialogo con lo invisible... muy conmovedor.
Otro aspecto muy bonito es que en definitiva es amor lo que profesas, pero no se sabe no quien habla, no a quien, ni que sexo son ni nada, eso es lo más bonito, es como si el amor valiera la pena sea cual sea la cirscuntancia.
No se si te interese mucho mi amigo jajaja, pero este tipo de amor, asi de tierno y sincero es de lo que Dios a hablado a través de los siglor, aún no lo entendemos pues siempre lo manchamos con otro tipo de sentimientos, como la posesión y la misma lujuria.
Hay una frase que me gusto.. "besar piel que nadie besa" ufff esta cargada de mucho significado.
Realmente escribes bien mi brother.. no dejes de hacerlo... yo tampoco lo haré...
Me gusta la nostalgia del relato, derrocha añoranza y una melancolía extraña, de esa que se disfruta pero se sufre. Pero fíjate, creo que quienes no han tenido esa sensación nunca deben ser muy desdichados, porque solo en la ausencia del ser amado se experimenta el amor con mayor intensidad.
ResponderEliminarConfieso que yo no soy tan cuidadoso con los recuerdos. No me alcanzaría ni la paciencia ni la fortaleza para echarlos todos así, en un vaso, debajo de la cama. Saberlos ahí, vibrando, intentando escapar, me volvería loco. Para mí los recuerdos son como esos árboles que se ven mejor si no se podan, y crecen a su ritmo, si son fuertes, o se marchitan y mueren si no valen la pena. Pero que cada quien haga con sus recuerdos lo que más le plazca.
Un abrazo.
Gracias Daniel... y qué pasó con el CálamoCurrente?
EliminarSi los recuerdos por la magia que ellos guardan se convirtieran en agua, con el vaso de Waldir la esparciria, alrededor de la llama que hace que estos recuerdos quemen.
ResponderEliminarGracias! a todos! :( estoy de baja Me 109 cito...
EliminarAnimo animo,,, Caminando de Amaia Montero es genial...
ResponderEliminarla buscaré en youtube...jeje
EliminarTuve oportunidad de leer unos comentarios de un tal Manuel Membreno, donde se arroba la piedra filosofal de la verdad absoluta como que el fuera que no se quien, quizas es uno de los mejores maitros de la literatura en estos momentos Nicaraguenses.
ResponderEliminarDon Manuelito Ud podra escribir todo lo que se le plazca pero de Ud a donde encuentro algo que me diga de su calidad literaria, y no le digo nada de titulos por que a lo mejor su señoria algun Doctor en Filologia debe ser.
En cuanto al Señor anonimo, el puede acceder al blog de waldir o de Emila Persola o Martin Mulligan pero no tiene derecho a venir a ofender a nadie con palabras vulgares y en el caso particular a ofenderme a mi, si el fulano ese no me conoce, eso es tipico de los bergantes, patanes, zafios y cobardes, pero me llama la atencion su mencion es que acaso hay alguna relacion entre Ud y El, me arrobo el derecho de la duda manifiesta.
Por ultimo le digo que Ud es el tipico Nicaraguense que mencionaba el poeta Pablo Antonio Cuadra en sus escritos a maquinas, mucho tiempo atraz, a lo mejor Ud ni habia nacido, pero El decia que los Nicaraguenses como Ud son buenos a criticar, pero malos a construir, construya que la patria necesita de constructores, suficiente con el imbecil que se hace llamar presidente y que pedazo a pedazo esta desbaratando la nacion..
No lo saludo para despedirme por que suficiente tiempo ya me a tomado escribir estas lineas, ademas me imagino que asi como a mi a Ud tampoco le interesa mantener ningun vinculo comunicativo.
Ciyu.
Lo mejor del comentario de su señoria pequeño perdon quise decir menbreno es lo siguiente:
ResponderEliminarEn fin, el texto, éste particular de los cronopios, necesita más trabajo, igual que todo lo que uno escribe. Ojalá entendás lo que te dije; ojalá, también, te valga verga.
Saludos.
Nota:
Si las palabras soeces no las puso al comienzo de su comentario, las tenia que poner al final, como dice el dicho " Si no la derramas a la entrada, la derramas a la salidad", pero que la derramas, la derramas de eso no hay duda.
Graaacias Me109cito!!!!!!!! lo único que puedo decir es que yo también me quedo con el beneficio de la duda con respecto al anónimo, por otro lado, no se me amedranten ni usted ni Aldo ni quien quiera que le guste leer mi blog... por lo demás, usted lo ha dicho todo... :)
Eliminar