…Y que muramos

…Sí, y que me llevés a cualquier lado, donde pueda respirar lo que fuiste durante todo este tiempo que no te vi. Que me hagás perder el control como solías hacerlo, que entre el alcohol, las divagaciones y tu barba yo pueda olvidar quien soy. Sí, que me saqués de aquí, que me llevés fuera de este encierro: yendo hacia esa muerte donde yaceremos juntos como esas veces en el pasado. Sí, sólo vamos fuera de aquí, por favor…, donde sea, no importa.

¿Por qué soy feminista?

Las causas del movimiento feminista me mueven. Calan lo más profundo de mi ser intelectual y me adhiero a este con facilidad, como quien encuentra armas, argumentos e historia para seguir luchando, para creer que la equidad y la justicia es el trabajo incesante de cada día. Para creer que es posible.

Sabemos que la piedra angular del feminismo son las mujeres, por ello suelo encontrarme con la pregunta de algunas personas: ¿por qué sos feminista? Pregunta que surge, aunque yo no haya dicho en algún momento: “Soy feminista”.  Yo nunca se lo he dicho alguien, excepto el otro día a Vanessa Rivera en un tuit, pues compartíamos e intercambiábamos unas opiniones y dicha interacción me llevó a decirlo. Creo que decir  “soy feminista” “soy X ó Y cosas” son enunciados que no desencadenan acciones colectivas como a mí me gustaría, por lo tanto, inconscientemente no ando pregonando “soy esto” “soy lo otro”.

El otro día alguien comentaba mi ensayo: “A propósito del contrato a parirhijos” y, con intenciones de ofenderme, escribió o daba entender que mi postura hacia temas como el aborto terapéutico o las causas feministas se debían  a que yo era “gay” y bla bla bla…   Y pienso: ¿A caso quien escribió ese comentario sabe que tengo mamá y 4 hermanas? ¿Sabe que de un modo u otro fui testigo y parte de la violencia que las circunda a ellas? ¿A caso sabe que mi madre tendrá 40 años de matrimonio con mi papá, pero no necesariamente por amor, si no porque la educaron para soportar humillación y violencia? ¿ah?

Creo que el feminismo como movimiento ilustrado y social no sólo me ha servido para deconstruir elementos y códigos de la heterosexualidad normativa. Me ha permitido renunciar a un poder que se basa en la violencia, humillación y subvalorización de las mujeres, porque este machismo y patriarcado es un sistema social que me ha afectado. Si apoyar, luchar y compartir las causas feministas te hace feminista: soy feminista, aunque si de definir se trata: soy queer ¿eh?   :D

Imagen tomada del Colectivo Feminista Panteras Rosas. Mis declaraciones acerca del feminismo en el centro, a propósito del 8 de marzo.

Vos, yo y el dolor

"La ballon rouge" fotografía tomada del blog Les filles du jardin

Le he dado vueltas a la cabeza pensando en una descripción exacta del dolor. No sé si será genuina o será el fruto de esos hilos en el tiempo a los que llamamos coincidencias, sólo puedo decir que el dolor es lo más semejante a un agujero en el pecho. Ciertamente, un agujero que duele cuando respiro. Un agujero cuyo tamaño no descifro porque me da la sensación de que tiene raíces que irradian el dolor hacia todo lo que soy. Entonces, ya no sos vos quien causa este dolor. Es el dolor de ser yo. Creo en el perdón, la regeneración, la cura y el amor que se encuentra dentro de mí, pero no en la ausencia del dolor. Pienso que es lo que hace saberme vivo. Saberme yo.