sábado, 10 de marzo de 2012

“SALUTACIÓN A LEONARDO”


A mi maestra, María Inés Barrios

Este poema es la segunda y última salutación explícita que hace Rubén Darío dentro de su poemario “Cantos de vida y esperanza”, después de la “Salutación al optimista”. “Salutación a Leonardo” es el saludo que el maestro modernista hace al “hombre universal” del renacimiento: LeonardoDa Vinci.
En “Azul…” Darío se planteó como temática la defensa del arte y del artista, expresado en numerosos cuentos y poemas, por lo tanto, podemos destacar que en este tercer gran poemario Darío trae a colación una de sus tantas preocupaciones ya planteadas desde sus inicios en el arduo camino literario que escogió.
Desde la primera estrofa del poema Darío plasma, mediante una especie de invocación al pintor del renacimiento, la indiferencia que la sociedad tiene hacia el arte y hacia el artista. Señala que la estirpe del italiano también es indiferente: “¡Tu Aurora! Que estirpe de la indiferencia la mancha…”
El poema sigue como una sucesión continua de alabanza al renacentista, mientras destaca a grandes rasgos lo que fue la vida del pintor como icono de la genialidad artística y humana. Entre esos aspectos denuncia la opresión que la iglesia Católica ejerció sobre la ciencia, el oscurantismo en que la sometió, por lo tanto, destaca la labor de Da Vinci en esas situaciones sociales. “Maestro si allá en roma quema el sol de Segor y Sodoma la marga Ciencia de purpúreas banderas, tu gesto la palma nos da redimidas…”  Cabe señalar que la polifacética personalidad y genialidad de Leonardo en su tiempo le ganó el repudio de la iglesia y el título de mago.
Rubén nunca descuida los elementos que han caracterizado su poesía, de manera que, además de incluir motivos Leonardinos como  La Gioconda o Florencia, Italia, también incluye alusiones clásicas de lo griego y lo romano; en este caso inserta a Pomona la divinidad romana protectora de los árboles frutales o de la naturaleza en general desde la primera estrofa exaltando por  consiguiente la figura del ilustre Da Vinci.
Ya en las estrofas finales Darío hace alusión a una historia bíblica, como lo es la de Esther, en este caso se vale de personajes de esa historia como el  rey Asuero, a quien dentro del relato bíblico se narra que deberían de visitar los jóvenes al cabo de doce meses después de una rigurosa preparación donde los primeros seis meses se ungían con óleo y mirra, y los otros seis meses con los perfumes de las mujeres (Esther 2,12).
 Utilizando este intertexto Darío nos plantea que el arte purifica más que cualquier ritual religioso, por lo que no importa que el rey no reciba a Leonardo, pues su arte lo redime y lo purifica más que la mirra y el óleo. También plantea que Leonardo utilizó su arte para subyugar sus pasiones humanas.
Por otra parte, un aspecto que es muy importante señalar es que como elemento característico de este poemario a diferencia de los anteriores, Darío, expone más sus propios sentimientos. Hay una especie de identificación de artista por parte de Darío con el pintor italiano y eso lo podemos constatar en la segunda estrofa donde Darío simbólicamente une su arte al arte del “hombre universal”. “Sonrisa más dulce no sabe Gioconda… hermanan en una dulzura de luna que suave resbala…y el verso del ala del mágico Cisne, sobre la laguna”.
En este caso Darío añade el símbolo de su poesía: el Cisne, al paisaje de los cuadros de Leonardo, en los que predomina de fondo paisajes sombríos y lagunas solitarias.
En lo que se refiere a lo estilístico Darío estructuró este poema en setenta y seis versos “semilibres”, pues hay combinación rimada. Abundan los pentasílabos, decasílabos, endecasílabos y algunos alejandrinos. Utiliza a modo de estribillo “Los bufones que hacen sonreír…”, adjetivaciones como “purpúreas banderas” “divino monarca” etc. Hay una personificación de la Aurora en el inicio del poema y abundan los símbolos que suelen ser motivos de la poesía dariana: Cisne, Pomona, Luna, Laguna, Roma, Sodoma, esfinge, rosas, Gioconda etc.
La Gioconda o Mona Lisa, pintura de Leonardo Da Vinci, imagen cortesía de Arte España.

2 comentarios:

  1. Si bien es cierto que el Principe de las letras castellanas y padre del Modernismo Ruben Dario, en esta salutacion al Maestro Leonardo Da Vinci denuncia la opresion que la iglesia Catolica ejercio en su tiempo y momento en contra de Leonardo, tambien es menos cierto que el bardo en su momento se puso de hinojos ante la iglesia Catolica cuando en un acto de reverencia religiosa besa el anillo del Papa en una audiencia en el Vaticano, y que Jose Maria Vargas Vilas escritor Colombiano comtemporaneo de Ruben Daria, fustiga el hecho en un escrito donde reclama que no debio Ruben Dario besar el anillo Papal y mucho menos postrarse ante este, si no todo lo contrario, pues la genialidad de Dario era universal y ademas permaneceria en el tiempo en cambio el pontificado del papa pasaria a la historia sin pena ni gloria a travez del tiempo.

    Waldir investiga sobre la relacion de Ruben Dario con Jose Maria Vargas Vilas al cual en lo personal lo admiro por la valentia de sus escritos y el fuego de su palabra.

    Y bienvenido a la vida de nuevo.

    Saludos.

    Ciyu

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  2. Casualmente ayer compre Cantos de Vida y Esperanza, y lei esta Salutación a Leonardo. Darío escribió muy temprano en su edad, cuando aún no hacía su primer viaje fuera de Nicaragua, dos poemas en contra del Papa, luego se reconcilia con la Iglesia con otro poema cuando este estaba en Chile, y luego vuelve y denuncia de nuevo... creo que es recurrente este tema asi como es recurrente el ir y venir a la Iglesia.
    El poema, muy dariono como dices, no es uno de mis favoritos, y aunque no niego la calidad y la estructura, soy defensor de la idea de que la poesía debe de ser comprendida por todos, es decir, un poco mas simple sin perder su calidad...
    Pero bueno, eso es quisas por que no soy muy fan de los versos...Los cuentos de azul me fascinan todos...
    ATT. Aldo

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